Durante las últimas semanas, Universitario de Deportes ha estado en el centro del debate por haber contratado a Andy Polo a pesar de que el futbolista está involucrado en un caso de agresión de género. Dicha decisión motivó que hinchas del club se manifestaran públicamente en contra de la decisión de la administración temporal. María José Castro se comunicó con tres integrantes de Universitario Feminista para conocer sus motivaciones y su punto de vista sobre las amenazas que recibieron por su intervención.
El 12 de marzo el colectivo Universitario Feminista realizó una intervención contra el fichaje de Andy Polo durante el partido entre el club crema y Cienciano del Cusco celebrado en el Estadio Monumental. Portando papelotes con mensajes como “Ningún jugador es más importante que los valores e historia del club”, “No quiero agresores ni en tribuna, ni usando el uniforme en la cancha”, “un caso archivado es un agresor liberado” manifestaron su indignación por la decisión de la administración temporal del club crema de contratar a un jugador que ha sido denunciado por su expareja Génessis Alarcón por violencia de género.
Dicha protesta terminó generando diferentes reacciones que van desde las amenazas de muerte hasta el apoyo desde otras camisetas. Sudor tuvo la oportunidad de conocer el testimonio de tres integrantes del grupo para saber por qué lo hicieron, cómo han vivido los efectos de su manifestación y conocer un poco de sus objetivos.
A continuación, el testimonio de tres mujeres que prefirieron que no se pongan sus nombres para evitar represalias y que pidieron ser presentadas como integrantes de un colectivo feminista, que no cree en jerarquías sino en un espacio horizontal. Para ellas, todas son representantes, nadie ejerce un liderazgo único (una característica que contrasta con la tradición de las tribunas).
LA VOZ DE LAS QUE TODAVÍA TIENEN MIEDO
Somos una organización feminista y apostamos por la horizontalidad, todas tenemos voz y toda opinión es válida. Nuestro grupo nació un 25 de noviembre del 2019, Día de la no violencia contra la mujer. Queremos luchar contra toda esta violencia que vivimos, desde la económica, física, psicológica y sexual. En el camino, fuimos pensando cómo hacer cosas con dos elementos, al ser hinchas de la U desde pequeñas y nuestra postura feminista y anticapitalista.
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Nos enteramos que posiblemente [Andy] Polo volvería a la U, pero fue de un momento a otro y no era seguro, así que convocamos a una pequeña protesta fuera del Lolo Fernández y ahí empezó todo. Ese día [el 12 de marzo pasado] fuimos pocas personas con nuestras pancartas y dijimos así seamos unas cuantas, algo de ruido haremos en el estadio. Se nos unieron personas que no son de nuestro colectivo. Sabemos que al estadio no se pueden meter telas, por ello se pensó en frases en papelotes. Cada una pensó, puso sus frases y nos juntamos unas diez u once en el entretiempo para mostrar nuestras pancartas.
Algunos nos decían: “A ver, sáquense el polo si son feministas”. Pero en ese momento, nos volteamos a mirar hacia la hinchada para que puedan leer y nos noten. Para nosotros la contratación es una falta de respeto e incluso es inseguro para las chicas del fútbol femenino. ¿Cómo va a llegar un agresor a la U y de manera tan impune?
Frente a la respuesta de la administración, sigo con la rabia dentro porque el club nunca se ha pronunciado frente a la violencia y amenazas que hemos recibido. Nos ha invisibilizado. Aunque seguimos con rabia eso no nos va a callar, vamos a continuar.
En redes sociales, hay de todo. De parte de la hinchada se ha recibido bastante violencia y si bien lo veíamos venir porque sabemos que íbamos en contra de todo, no imaginamos ciertas amenazas muy fuertes que parecen de fanáticos religiosos.
El club y su comunicado eran una amenaza y el reposteo que hizo la barra “Las de siempre” también implicaba un accionar si es que nosotras volvemos a alzar nuestra voz. Nos han dicho de todo, desde que somos de Gremco hasta aliancistas. Pese a que nosotras hemos realizado acciones frente al tema de Gremco, nunca hemos sido tan mediáticas como ahora.
La parte bonita de la historia ha sido sentir el compañerismo de otras colectivos, de otras compañeras que nos ha hecho sentir que realmente no estamos solas, incluso se han informado sobre fútbol que no es su tema o se han organizado para darnos su apoyo con comunicados. Eso se sintió demasiado bonito.
Pese a todo, siempre va a valer la pena ser la voz de las que todavía tienen miedo y ser la voz de las que van a venir porque las mujeres no hemos conseguido nada pidiendo por favor. Hemos tenido que hacer mucho ruido a lo largo de la historia para conseguir lo que tenemos. El varón se siente amenazado porque diez mujeres nos manifestamos frente a alguien acusado de agresión. Siempre va a valer la pena seguir (se le quiebra la voz).
La U y el feminismo para mí son la lucha del pueblo, de nosotras. La U siempre fue un equipo que nació desde abajo por ello queremos reivindicar nuestra lucha de mujeres dentro de la U.
LO DEPORTIVO ES POLÍTICO
Como mencionan las integrantes de UF, la militancia este grupo no surgió en las últimas semanas. Tienen más de dos años aplicando un enfoque de género a su hinchaje. Asimismo, su propuesta va más allá de lo deportivo, pues buscan un espacio seguro para todas las personas que asisten al estadio. El fichaje de Polo fue una afrenta para su búsqueda.
Mi primer acercamiento a la tribuna norte fue con mi padre. Yo era pequeña y veía su temor por lo que podía pasarme. Yo no quiero que haya más niñas con miedo como yo en ese tiempo, o incluso hoy que debo cuidarme, pensar en cómo vestirme, buscar apoyo. Yo quiero ver a niñas tranquilas alentando a la U sin el miedo de ser violentadas, manoseadas, cosificadas. Nuestra vida y el amor por la U hacen que queramos ser libres desde pequeñas hasta grandes.
Por ello, la lucha no es de ahorita, pues venimos haciendo activismo desde que se inició la barra. Queremos que el estadio sea un espacio seguro para todas, pero también salimos. Hemos ido a ollas comunes, hemos dado charlas, los 25 de noviembre hacemos actividades en espacios que queremos que sean seguros para todas. Nos relacionamos con el tema deportivo porque consideramos que lo deportivo es político, tenemos que cuestionarnos y sobre todo en el fútbol que no puede ser solo hacer barra y ponerse una camiseta
Nos sentimos indignadas por la presentación que se ha hecho de Polo con un video como un ídolo, pero nuestra lucha va a seguir a pesar del silencio cómplice de los medios de comunicación de gran alcance, a pesar de la directiva de la U, a pesar de la Trinchera Norte. Eso nos unió y nos sigue uniendo en esa lucha, en ese camino.
Es una lástima que todos quieran valerse del club por el que dicen dar la vida. Los barristas, la administración quieren sacar provecho de él sin pensar en cuáles son sus valores. Darnos cuenta de eso es triste. Nuestro ideal es limpiar y recordar los valores de la U. Para la actual administración no existimos, no tenemos voz, las mujeres no tenemos voz porque eso es lo que nos están diciendo: “este es un espacio de machos que son los que consumen”.
Todas las colectivas feministas que nos han dado su apoyo desde que supieron del tema, fue un abrazo bien bonito y el agradecimiento hacia ellas porque sentimos que no estamos solas y que la carga de tristeza y rabia se disipó. Incluso compañeras de otro equipo como una que dijo “soy de alianza, pero en esto las apoyo”- Eso es bonito. Hubo esas reacciones en redes sociales.
Yo encontré en el feminismo y en la U un lugar seguro. En estos momentos la U no está siendo tan seguro, pero cuando encontré este colectivo fue como combinar las dos cosas que más me interesan, me mueven y me organizan la rabia como solemos decir aquí. Es como el escape que se necesita para estar bien.
RABIA Y AMOR
La rabia de estas mujeres no ha cesado. Esta última semana, Andy Polo fue protagonista de dos programas de ATV. El 20 de marzo, el dominical Día D presentó su versión de los hechos. Un día después —en la misma fecha en que el jugador fue presentado por el club a través de un video—, el programa MagalyTV propaló nuevos audios en los que se escuchaba a su hijo, siendo testigo de las agresiones de las que era objeto su madre. “Por favor, mamá que no te pegue”, dice un atemorizado niño. Las integrantes de Universitario Feminista recibieron amenazas por denunciar a Polo. ¿Cómo seguir adelante pese a todo?
Cada una de nosotras también está involucrada en la lucha social y feminista. Pertenecemos a diferentes espacios, pero ser un grupo feminista dentro de un estadio es bastante difícil porque en el Perú eso no existe. En nuestro país hay mucho machismo, la barra es el último lugar al que una feminista quiere ir. La mayoría son varones, no se autocritican porque sus privilegios patriarcales son fuertes, sus jerarquías y el poder que tienen les nubla la cabeza y creen que, porque son hinchas y pertenecen a una barra, todo lo solucionan de forma matonesca. Eso fue lo que nos motivó a seguir luchando. ¿Hasta qué punto debemos cuidarnos para dejar de lado este espacio que también nos gusta? La idea es plantar lucha aún en estos espacios sabiendo lo que se nos viene.
Todo es político, lo personal es político y entendiendo eso nos enfrentamos a la violencia machista que se vive dentro y fuera de tribuna. Es por ello que se realizó esta intervención a la que se sumaron compañeras de otros espacios. Sabíamos lo que podía venir, aunque no tan rápido porque nuestras intervenciones anteriores no habían tenido un alcance nacional.
Arengamos “fuera, Polo” y generamos atención, pero también nos pusimos nerviosas porque muchas personas se ponían delante de nosotras, pero nos dábamos fuerza: “aguanten que ya termina el medio tiempo”. Muchas de nosotras teníamos miedo a los golpes de la policía por haber metido carteles y a la respuesta de tantos varones que estaban siendo cuestionados porque mucha gente dice “si cuestionamos las agresiones, toda la tribuna se queda vacía”.
Nos llenamos de tanta rabia e indignación, y como siempre nos decimos: “organizamos nuestra rabia” con las que deseaban hacerlo. Sabíamos que seríamos pocas y quizás no iba a trascender el momento, como nos había pasado en otras intervenciones. Creo que antes no causamos ese impacto porque no había tocado ese punto vulnerable en los hombres. Las intervenciones que tenemos intentan visibilizar a la mujer, pero nunca habíamos metido el dedo en la llaga y cuestionado el privilegio del varón. Esta vez se hablaba de un agresor que llega al club y que no es bienvenido, no es dable que pongan como referente a una persona con estas denuncias, más allá de la justicia que a veces solo existe para algunos. Esa rabia nos unió, lo hicimos, siento que los agarramos fríos. Nosotros no buscamos el “agresor lárgate, nunca más estés aquí porque somos puritanas”, lo que buscamos es que empecemos a cuestionarnos ya y a crear un cambio pese a lo que se pueda haber hecho antes.
Estamos intentando crear espacios seguros para nosotras, para nosotres porque también hay personas LGTBIQ. Hay mucho machismo y homofobia dentro de la barra. Si para una mujer es peligroso estar en estos espacios recontra machistas en lo que te hipersexualizan, imagínate para una persona LGTBIQ. No se va a sentir segure jamás. Por ello, buscamos espacio para todos, niños, niñas, mujeres trans, hombres trans y aunque no sea nuestra misión para ellos también porque los varones viven mucha violencia. Es muy peligroso, pero nos arma de valor saber que nuestras hijas entren en el futuro a la tribuna y no encuentren lo que nosotras hemos vivido.
Es difícil tocar la vulnerabilidad de muchos machos que creen que este lugar les pertenece y las mujeres que llegan ahí intentan encajar, dejan que las cosifiquen, se hacen de la vista gorda porque saben que numéricamente son superiores a nosotras e implantan respeto por medio de la violencia. Lo cierto es que también hay mucha misoginia dentro de la barra. Sabemos que probablemente nos hagan algo muy a su estilo cobarde de instrumentalizar a otras mujeres para amenazarnos como la barra femenina “Las de siempre”, que al compartir el comunicado de la Trinchera también lanzó su amenaza planteando que a la tribuna solo se va a alentar como si fuéramos robots para repetir una y otra vez cánticos machistas, falocentristas, que “pongan huevos” como si nosotras los tuviéramos.
Nos han dicho que nos aventarán de la tribuna si volvemos a hacer algo, pero nos van a volver a ver. El club ha sido nulo con nosotras, mejor dicho, la administración actual porque ellos no son la U. Sabemos que el club está en crisis, pero la nueva administración confirma su machismo con esto de Andy Polo porque para las cuestiones del club toman en cuenta a las barras masculinas, pero no a las mujeres. Incluso el último domingo se ha entrevistado a Polo en canal 9 para lavarle la cara y que luego sea presentado el lunes con bombos y platillos. Pero no se han acercado a nosotras, pese a que el Ministerio de la Mujer se ha manifestado.
La prensa nos ha escrito, pero hay muchas cosas que no compartimos y preferimos mantenernos al margen porque apañan agresores, sexualizan mujeres en sus portadas y quieren instrumentalizar la lucha. Por eso estamos con ustedes, nos interesa que nos den voz para expresarnos y sentirnos seguras.
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Pero vale la pena (voz quebrada). Porque estoy harta, y no quiero que nadie pase lo que hemos pasado, todo lo difícil que hemos tenido que atravesar a lo largo del tiempo. Pero vamos a seguir, aunque les joda mucho y así seamos pocas. Ya no tenemos miedo y si tenemos miedo, nos tenemos a nosotras para apoyarnos. Para mí ser feminista en dos palabras es: amor y rabia. Y ser hincha de la U es garra.
Luego de la conversación, las integrantes de Universitario siguieron en su lucha cotidiana, pese a la conferencia de prensa realizada el 23 de marzo en la que la administración del club, bajo el liderazgo de Jean Ferrari, planteó que el contrato del denunciado está condicionado a que solucione sus “problemas personales” y que no jugará hasta que los enmiende, pese a que la conciliación no aplica para estos casos. Además, insistió en que se trata de un problema de dos personas mayores que deben cuidar a sus hijos. ¿Será que Génesis, como las barristas de UF, debe ser señalada por denunciar un abuso?, ¿será la nueva forma de pronunciarse frente a los temas de género por parte de los representantes cremas?
Y aunque muchos hinchas vean a su equipo como una institución incuestionable que se debe defender a toda costa y se sienten ofendidos cuando se señala los errores de su club, muchos otros se consideran defraudados por el tema Polo y se les hace difícil volver a encontrar ese amor, esperanza y fuerza. Quizás son ellas las que personifican esos valores hoy. Ellas, que siguen con garra enfrentando la violencia contra la mujer en un mundo que las amenaza por rechazar la misoginia y el machismo. ~